...
O es que acaso no has comprendido que,
para mirar su rostro sonriente
y escuchar las notas de su risa estridente
es que en éste mundo yo respiro.
Para todos los días mirarla
y cada noche poder admirarla.
¿Me dirás que es crimen tanto amarla?
Esas voces que resuenan en mi mente, burlonas,
son las mofas del fracaso que, cual segadoras
vienen a buscar su cosecha de amarguras
germinadas en aquellos que ante éstas pierden la cordura.
!Mírame a los ojos cuándo te hablo¡
Y dime si no es ella el mas hermoso de los ángeles.
Tanto lo es, que sin temor a cometer errores,
puedo afirmar que es envidia del mismo diablo.
¿O acaso nunca escuchaste decir
que era con zafiros y rubíes
que se adornaba Satanás?
Empieza esto a parecerme muy Locuaz.
Pero sea cual sea el caso aquí presente
solo he venido a alabar su visión
y a hacer, a aquel que escuche mis palabras, conciente
del suplicio que se vive en mi prisión.
Que no es cárcel de altos muros ni jaula con rejas de metal,
es prisión que en susurros me arrebata la libertad.
He de decir que es duro mantener,
bajo llave, los sentimientos ocultos
condenándome a por siempre pretender
que ya no veo más sus atributos.
¿Aún preguntas cuáles son?
Y aunque ya lo he dicho tantas veces
he de suponer que no escuchaste, entonces,
lo que he dicho en este son. ...
Dark Shadow


Wooo! Valle, una vez iniciado en la poesía nadie te detuvo.
ResponderEliminarEstá muy padre el poema, me gustó, je je!